La trayectoria criminal de este hombre se ha extendido por más de 20 años
infobae.com
En 1989 se graduó de la Porter High School, ubicada en Texas, Estados Unidos, un hombre que 36 años más tarde sería detenido en México. Su nombre es Sotero “S”, aunque desde su juventud es conocido con el alias de ‘Soty’.
Al terminar su educación secundaria, ‘Soty’ se había posicionado como uno de los jugadores de fútbol soccer más destacados de Brownsville. Su desempeño en la posición de defensa lo llevó a ser considerado por medios locales como uno de los principales representantes de este deporte en la ciudad.
Posteriormente, en circunstancias poco claras, Sotero “S” incursionó en la docencia como profesor de Historia para estudiantes de nivel medio. A sus 31 años, su nombre apareció nuevamente en la prensa texana, aunque dicha mención no tenía relación alguna con su labor académica; había sido condenado a 27 meses de cárcel.
En el año 2003, ‘Soty’ fue detenido por vender armas de fuego sin contar con los permisos necesarios. Las investigaciones revelaron que utilizaba una cervecería como fachada para realizar las transacciones. Durante cuatro meses, un agente de investigación se hizo pasar por un inmigrante originario de México para acercarse a ‘Soty’. El oficial encubierto consiguió que este hombre le vendiera un total de 12 armas en seis negociaciones distintas.
‘Soty’ se declaró culpable del mencionado delito en noviembre de 2003 y en febrero del año siguiente un juez dictó la sentencia correspondiente, así como una pena monetaria de tres mil dólares. No obstante, la trayectoria criminal de Sotero “S” estaba lejos de terminar.
Autoridades del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) y de la Agencia de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF) descubrieron que entre 2007 y 2008, Sotero “S” participó en un esquema para exportar armas de forma ilegal hacia México. En compañía de Óscar Peña —su socio en una tienda de conveniencia— adquirieron armas vía internet a un hombre llamado Mark Machado, quien no contaba con las licencias requeridas.
Posteriormente, Sotero “N” y Óscar Peña vendían las armas a precios inflados a personas con el conocimiento de que serían llevadas ilegalmente a México. Ambos hombres “adquirieron más de 100 armas de fuego durante el transcurso de la conspiración de un año de duración, la mayoría de las cuales eran rifles semiautomáticos del calibre .223”, señala un informe de la Fiscalía del Distrito Sur de Texas.
Los tres implicados fueron imputados en Texas en enero de 2009. Nueve meses después, Sotero “N” se declaró culpable de los delitos de conspiración para exportar armas y trasiego ilegal de arsenal hacia México, por los cuales recibió una sentencia de 87 meses de cárcel, además de una multa de seis mil 500 dólares y un período de tres años de libertad supervisada cuando terminara su tiempo en prisión.
Un documento del Departamento de Seguridad Pública de Texas revelado a través del portal Wikileaks refiere que, en una fecha no especificada antes de su segunda captura, ‘Soty’ habría escapado a México gracias a que miembros de un cártel pagaron su fianza. Asimismo, se presume que este individuo admitió haber exportado al menos tres mil armas.
Sotero “N” escapó de la prisión federal de Texas en la que purgaba su condena y logró evadir a las autoridades hasta el 12 de febrero de 2025, cuando fue ubicado en el municipio de Zihuatanejo, Guerrero.
Además de su historial como traficante de armas, “se tiene conocimiento de que esta persona está implicada en el tráfico de drogas, al enviar heroína y cocaína a Estados Unidos a través de Laredo y McAllen, Texas; droga que era transportada oculta dentro de baterías de automóvil”, detalló la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) al anunciar su captura.