Por Nayar Araiza López
Héctor Santana rumbo al 2027: realidades frente a especulaciones
• La reelección en Bahía de Banderas, lo único seguro en medio de la efervescencia política estatal
• Quienes ya se alborotan tempranamente para contender por la candidatura de MORENA a la Presidencia Municipal, tendrán que apaciguarse
• En la arena política estatal ya inició la carrera tempranera por la sucesión a la gubernatura del 2027, y el alcalde de Bahía aparece en las conversaciones, resultados como los suyos lo ponen en el radar de las grandes ligas
• Santana ha logrado algo que pocos, legitimarse en el poder con hechos, no con propaganda. Su fórmula –escuchar, rendir cuentas y superar expectativas– le está funcionando
La legitimidad no se regala, se gana con resultados. En Bahía de Banderas, el presidente municipal Héctor Javier Santana García está construyendo su autoridad a golpe de cifras históricas. A solo siete meses de gobierno, puede presumir una recaudación récord que supera los 1,800 millones de pesos – 417 millones más de lo previsto en la Ley de Ingresos, por lo que este logro financiero rebasa a todas las administraciones anteriores, y no se trata solo de juntar dinero, esto ha sido producto del orden, la confianza ciudadana y la eficiencia administrativa de su gestión. En paralelo, su política de austeridad y buen manejo redujo gastos inútiles, ahorrando en estos meses más de 80 millones de pesos, demostrando que la racionalidad y responsabilidad no son solo discurso, sino práctica diaria.
Con esos recursos bien administrados, Santana los ha convertido en obras palpables. En poco más de medio año se han invertido más de 600 millones de pesos en obras públicas –y la cifra se encamina hacia los 720 millones invertidos–, ya que recientemente anunciaron otros más de 120 millones para este mes de marzo, desde pavimentaciones con concreto hidráulico de larga duración hasta infraestructura para servicios básicos. Este ritmo de obra pública sin precedentes fortalece el rostro turístico del municipio y mejora la calidad de vida de las familias bahiabanderenses, todo sin endeudar al municipio. Cuando el trabajo habla, las palabras sobran.
Otro pilar de la legitimidad de Héctor Santana ha sido su política de cercanía y transparencia, ya que Héctor Santana mantiene un contacto directo con la ciudadanía. Cada lunes, encabeza las Audiencias Ciudadanas “Hechos para Servir”, un ejercicio itinerante donde se sienta a escuchar de primera mano las peticiones y problemas de la gente. No hay mejor termómetro del sentir popular que mirarle a los ojos al vecino que exige soluciones; Santana lo sabe y por eso no ha faltado a su cita semanal con el pueblo. Ahí mismo lleva a su equipo de directores municipales para resolver al momento trámites y solicitudes, dejando claro que es un gobierno que escucha y atiende en el terreno.
La transparencia institucional tampoco se queda atrás. Cada miércoles se realiza la ya célebre “Rendición de Cuentas” semanal, un encuentro con medios de comunicación locales en el que Santana, flanqueado por sus funcionarios, informa de los avances, gastos y acciones de la semana. Esta práctica de abrir la información al escrutinio público de forma constante es inédita en la región; implica que cada peso y cada decisión se ponen a consideración de la opinión pública sin ocultar nada. En tiempos donde la desconfianza suele ser la regla, Bahía de Banderas vive una excepción, un gobierno municipal que rinde cuentas en vivo y en directo, y que con ello ha restaurado la confianza de la ciudadanía. Prueba de ello es que la cartera vencida en agua potable (OROMAPAS) y en impuesto predial ha bajado significativamente.
Como era de esperarse, estos logros han catapultado la aprobación ciudadana de Héctor Santana a niveles inéditos. Hoy por hoy, encabeza el ranking de alcaldes mejor evaluados en Nayarit con 64.3% de aprobación, según una encuesta de Demoscopia Digital publicada por La Jornada. Para ponerlo en contexto, Santana supera en popularidad a los alcaldes de Tepic, Compostela, Xalisco y otros municipios importantes del estado. No solo ganó contundentemente las urnas en 2024, fue el candidato más votado en todo Nayarit en aquella elección municipal, sino que ha revalidado ese apoyo con trabajo diario, al punto que su porcentaje de aprobación actual prácticamente calca el resultado electoral. Eso se traduce en legitimidad ganada a pulso: la gente no solo votó por él, ahora confirma que no se equivocó.
Con este panorama, es natural que su nombre suene más allá de Bahía de Banderas, puesto que en la arena política estatal ya inició la carrera tempranera por la sucesión a la gubernatura de 2027, y el alcalde de Bahía aparece en las conversaciones. Más de uno especula que Santana podría buscar la candidatura de MORENA a la gubernatura de Nayarit –al fin y al cabo, resultados como los suyos lo ponen en el radar de las grandes ligas– y él mismo se ha colocado “en alto” en las encuestas que miden figuras con potencial para ese reto. ¿Será que Bahía de Banderas exporte a su líder municipal al resto del estado? Los próximos años lo dirán.
Sin embargo, en medio de la efervescencia política, conviene separar los deseos de la realidad, lo más tangible, por ahora, es el camino de Héctor Santana hacia su reelección en 2027 como Presidente Municipal. Si mantiene este paso firme, no cabe duda de que tendrá amplias credenciales para pedir la confianza de la gente por otros tres años al frente del municipio. Y ya después, el tiempo dirá si esas mismas credenciales le alcanzan para metas mayores.
En cualquier caso, Héctor Santana ha logrado algo que pocos, legitimarse en el poder con hechos, no con propaganda. Su fórmula –escuchar, rendir cuentas y superar expectativas– le está funcionando. Los resultados hablan por él, y la ciudadanía de Bahía de Banderas, hasta ahora, responde con apoyo y satisfacción. Queda camino por recorrer y retos que enfrentar, desde sostener el ritmo de obras hasta seguir mejorando la seguridad y servicios en cada rincón del municipio. Pero si algo ha dejado claro esta administración es que cuando un gobernante hace las cosas bien hay que reconocerlo; y cuando se equivoca, habrá que señalarlo.
Hoy por hoy, Santana tiene a la gente, a la prensa local y a sus colegas políticos atentos a Bahía de Banderas por las razones correctas. En un panorama nacional donde sobran decepciones, aquí hay un ejemplo de que la confianza ciudadana sí se puede ganar y, más difícil aún, mantener. Por lo pronto quienes ya se alborotan tempranamente para suceder a Héctor Santana en la Presidencia Municipal, tendrán que apaciguarse, porque lo único seguro, es la reelección al 2027, sus resultados al frente del gobierno así lo posicionan, si mantiene este ritmo, “mañana Dios dirá”. Va.